En el nombre de Dios el clemente y el misericordioso
Voy a escribir sobre un tema muy importante para todos los maridos y mujeres.
Tener una vida feliz tiene muchas causas, pero en este escrito quiero hablar sobre una de las causas más importantes.
Podemos llamarla viva modesta, desde la boda hasta la muerte.
Hay mucha gente que desde su primer seceso importante de su vida (la boda) empieza a gastar el dinero en tonterías y naderías.
Una boda modesta, una ropa modesta, una casa modesta, unos muebles modestos, una comida modesta y etc.
Lo que he dicho no significa tener una vida desordenada, aburrida y sucia. Una casa modesta puede ser bonita, una ropa modesta puede ser bonita y puede tener buen olor, una comida modesta puede ser bonita y deliciosa. No siempre el más caro es el mejor.
Alguien me pregunta, ¿Quién puede vivir así?
Sí, es difícil, pero es posible y cuando nos habituemos así, será muy fácil y cómodo y muy dulce.
Voy a decir un ejemplo de una pareja que vivía así. La mujer de esta historia en la noche de su boda regaló su ropa nueva bonita a una pobre para ayudarle con consentimiento personal. La mujer de esta historia aceptó casarse con su marido, cuando él no tenía nada, solo una armadura. Con el dinero de la armadura, solo pudieron comprar: vaso, jarra, molinillo de mano, cortina y unas cosas más. En la noche de su boda alimentaron a los pobres. Toda su vida era modesta aunque el hombre de esta historia era el rey de una parte muy grande de la tierra.
¿Quién sabe de quién es esta vida?
De Imam Ali y Fátima, que la paz sea con ellos.
Eso es un ejemplo para nuestra vida. Ellos nos encaminan al camino recto.
Ojala todos nosotros obedezcamos a Dios y el profeta y su familia pura.